Como lograr tener el cutis de porcelana

La piel de porcelana es lo último en tendencia de maquillaje, aunque para lograrlo es necesario primero tener una piel sana y bien hidratada.

Cuidados para una piel de porcelana

Lo primero que tienes que conseguir es unificar el color natural de tu piel, eliminando manchas, puntos negros y cualquier signo de enrojecimiento (típico del frío, por ejemplo).

Exfoliación y limpieza diaria


Elimina de tu piel todas las células muertas que le dan una sensación áspera y la llenan de puntos negros. Una vez por semana es suficiente. Puedes utilizar los productos del mercado o hacer tus propios exfoliantes caseros.

En cuanto a la limpieza diaria, hazla con jabón neutro y sin perfume de glicerina. Es súper suave, pues al no contener químicos ni perfumes, limpia la piel naturalmente.


Eliminar manchas y el enrojecimiento

Quita las manchas de tu piel con una crema blanqueadora y aplícate diariamente crema con filtro UV. Así la protegerás del sol y, con ello, de nuevas manchas. Si tu piel tiene tendencia a verse rojiza, utiliza cremas para ello. Básicamente, dilatarán los vasos capilares, favoreciendo la normal circulación.
Hidratar la piel

Hidrata todos los días tu piel, tanto en verano como en invierno. Esto evitará su envejecimiento prematuro. Para la elección del hidratante, ten en cuenta tu tipo de piel (seca, extra seca, mixta, normal o grasa). También es importante beber mucha agua para eliminar las toxinas de tu cuerpo; ocho vasos por día de agua pura son suficientes.

La hidratación es tanto para empezar el día, después de la limpieza facial, como para antes de acostarnos. Algunos productos son específicos para esto, como las cremas hidratantes. Sigue nuestros consejos para elegir las cremas de belleza adecuadas.

Maquillaje para una piel de porcelana

El otro pilar para tener piel de porcelana es la elección del maquillaje, ya que es el encargado de ocultar cualquier imperfección y de otorgar una imagen más cercana a la juvenil. Para tener piel de muñeca se utilizan los polvos blancos, o los nácares blancos.

En vez de una base tradicional, usa una crema hidratante del color de tu piel, así emparejarás tu tono de manera natural. Utiliza un rubor brillante en tonos beige o rosas y aplícalo en las mejillas hacia las sienes. El brillo hará que la luz se refleje más en tu rostro. Fija el maquillaje con el polvo nácar que te comenté con anterioridad.

Para los ojos utiliza un satinado claro y una máscara de pestañas marrón oscuro si tu piel es clara, o negro, en el caso de que tengas piel morena. Para los labios usa nácares o brillos suaves.

Finalmente, utiliza un poco de polvo brillante en los pómulos, mentón y frente para darle a tu rostro un efecto de luz natural.